Este es un post muy especial para mí. Surge a raíz de que mucha gente me haya preguntado por qué me dedico a esto.

Es una historia muy personal, pero que me sirvió de inspiración para dedicarme a esta profesión.

 

¿Quieres saber cuál es el secreto de mi pasión por la comunicación?

 

Desde niña, siempre había tenido mucha curiosidad por las cosas. Después las reflejaba de manera muy creativa, pintando, escribiendo y hablando.

Decían mis familiares más cercanos que hablaba por los codos y era muy observadora. Sigo siéndolo en la actualidad.

 

Observar te ayuda a crear y saber que le interesa a la gente.

 

Una relación que marcó mi vida fue la que tuve mi con mi abuela. Ella es el secreto de mi pasión.

Era una persona con carácter, muy valiente y sabía comunicar. Esto último es algo que me inspiró.

La recuerdo con un carácter arrollador, una fortaleza enorme y un carisma que llenaba cualquier estancia que ocupase. La gente la admiraba por como era, dejaba huella a su paso.

No tuvo una vida fácil. Sus padres murieron en la guerra, se hizo cargo de sus hermanos y después de sus seis hijos. Todo ello forjó una personalidad muy luchadora. Mi abuelo estaba en las cosechas de Francia para ganar dinero y pasaba mucho tiempo fuera de casa.

Todavía me recuerda, entre risas, que cada vez que volvía, mi abuela, le presentaba a un hijo nuevo.

Ella siempre se interesaba por mis creaciones y me animaba a dedicarme a algo que tuviese que ver con la comunicación.

Muchas de las tardes que pasaba en su casa las dedicaba a pintar y escribir y después se lo mostraba.

No por ser mi abuela dejaba de ser crítica. Al contrario, pero siempre de manera constructiva.

 

Esa forma de educación desde el respeto fue muy importante para mí.

Disfrutaba mucho de nuestras conversaciones, algunas inimaginables entre abuela y nieta, pero esa manera de transmitir sus mensajes, su esencia, me calaron.

Las palabras se llenaban de fuerza y significado cuando salían de sus labios.

Todos esos días que pasé junto a ella me hicieron aprender mucho y me sirvieron para encontrar una educación acorde con lo que me gustaba. Decidí estudiar Comunicación Audiovisual en Málaga. Bastante alejado de mi pueblo natal, Caudete (Albacete).

Aun así, mi familia me animó a seguir mis sueños, entre ellos mi abuela. Lo peor que recuerdo de aquella etapa fue el tiempo alejada de mi hogar, pero también tuve muchas experiencias que me ayudaron a crecer de manera profesional y personal.

Cuando volvía por vacaciones siempre estaba allí esperándome para contarnos las novedades de nuestras vidas y lo que adoraba era que cada domingo me llamase para hablar de la semana.

Me licencié y empecé a trabajar. No podía volver a casa porque las oportunidades laborales me surgían en otras partes de España, pero siempre estaba pendiente de ella y ella de mí.

 

Sus consejos, su entereza y su sabiduría siempre me acompañarán en mi vida. No los olvido.

 

Por eso, cuando alguien me pregunta cuál fue la inspiración que me llevo a dedicarme a esto, no dudo en mi respuesta.

Mi abuela fue la que incentivó mi pasión por comunicar como ella lo hacía.

 

¿Qué te ha parecido el post? ¿Qué te inspira en la vida? Cuéntame si así lo deseas, será un placer leerte.